lunes, 3 de diciembre de 2012

El saber sí ocupa espacio.

Tanto en las estanterías, como en el cerebro: como un disco duro, tenemos una capacidad determinada para almacenar datos. Además, la memoria juega malas pasadas y nos olvidamos de más cosas de lo que nos parece.

Una buena forma de alcanzar la sabiduría es cuestionárselo todo.

Porque el cuestionarse las cosas nos lleva a las verdades: podemos verificar que tal cosa es como decían, mediante la lógica, o que tal otra no es de esa manera, por lo que buscaremos otros caminos.

jueves, 11 de octubre de 2012

Las madrugadas de un viernes, o un sábado, de cine.

Me gusta recorrer las calles de madrugada en un viernes, o un sábado, mejor, de cine. Hay cierta melancolía, pero yo no sé por qué, a lo mejor por el pasado, por alguna chica, o por cualquier cosa.
En el cine el mundo se abre y se cierra al mismo tiempo, y en la oscuridad es distinto, mejor. La ciudad se siente más ciudad en algunos sitios, y le grita con su luz al centro del universo oscuro.
Mientras tanto la melancolía sigue tocando sus cuerdas y se repite infinita la misma canción.
A lo mejor la melancolía aparece por lo que pudo ser y no fue, o por lo que podrá ser y no será, o por lo que no es y puede ser. Tal vez si puede ser y no es, es finalmente. Pero solo en las madrugadas de un viernes, o un sábado, mejor, de cine.

martes, 17 de julio de 2012

Hijos de la situación

Soy de la creencia de que estamos altamente condicionados por las circunstancias que nos rodean, y dichas circunstancias moldean nuestro carácter. Por eso, las decisiones que tomamos sobre nuestro futuro no son nuestras, sino que son el resultado de un ''moldeamiento cerebral'' que viene dado por el ambiente en que vivamos. Todos criticamos al ladrón, pero si hubiésemos vivido en los suburbios sin acceso a la educación o a una vida feliz, ¿acaso no robaríamos también? Creo que todo esto nos hace a nosotros los humanos seres mucho más mecanizados. Es como si fuéramos títeres. La genética también contribuye en este aspecto. Seremos de una manera u otra y actuaremos de una manera u otra por la genética y el ambiente. Nuestras decisiones, por ende, vendrán determinadas de manera externa, como programadas de antemano. El ser humano es un ser libre, pero pienso en esa libertad como en una libertad entre rejas. Y por tanto, creo que si la humanidad es así, el individuo se vuelve mucho menos interesante, se devalúa. Estamos programados, de alguna manera, como está programado un ordenador. De todas formas nos sentimos únicos y especiales, y cada uno tiene una historia que contar.

miércoles, 30 de mayo de 2012

¡Quién pudiera no temer
a la muerte y sus secuaces
y caminar por las calles
sin que nada importara
y navegar con los aires
sin cuidado ni tormento...!

miércoles, 9 de mayo de 2012

martes, 8 de mayo de 2012

Mi tiempo

El tiempo no sirve para mirarlo
en vitrinas de museo;
y tampoco vale de nada el tiempo regalado.

El tiempo es bronce, el que se usa sin miramientos;
el tiempo es plata, el que se usa con deleite;
el tiempo es oro, el que se saca de las minas obscuras.

Y la felicidad reside
en encontrarlo en las minas, dorado,
beber su plata blanca con deleite,
embriagado de placer, apurando el bronce sin miramientos:
como si fuera un regalo divino
que se observa colmado de oro y plata y bronce
en la vitrina de un museo
regio
mientras no corre
ni se escapa.


Existencia extensiva.
El arte se alimenta de arte.

lunes, 16 de abril de 2012

Demonio en primavera

El sosiego me lo quita
incansable
el Azazel de mi frente.

¡Llegó la primavera!
Ya se abren los capullos
y en mi pecho se cierran
todas las esperanzas.
Ya se esparcen con el viento
mis penurias
y mis males.
¡Llegó la primavera! ¡Vamos a cortar la floresta entera de mi alma para plantarla afuera!

jueves, 12 de abril de 2012

¿Qué temer en la noche lluviosa?
Aahhh, ¡nada mal!
¿Ves? Puedo descansar tranquilo.
La lluvia lava mis penares.
Ya no lucen tan fatales.
Eran solo la sombra agigantada
de un gatito asustado.
Mira atrás, ¿no lo ves? ¡No eran ni fatales ni penares!
Pero bueno, no importa. Da igual que no lo veas. Es un gatito asustado de todos modos.

Vas a llegar muy lejos, chico

¡Vamos! Me gustaría ir al pasado
y decirme
y decirle a ese tierno niño de ojos redondos y negros
que llegará lejos. Chico, vas a llegar lejos.
¿No te lo dijeron nunca? Bueno, ¡mírame!
Yo soy tú. ¿No lo ves? Chico, vas a llegar lejos.
Deja a un lado todo lo demás
y siente mi presencia. ¿No la sientes?
Dame un abrazo, vamos. Yo soy tú. ¿Qué temes? Tú nunca serás malo. La bondad siempre ha imperado dentro de tu pecho.
No soy papá: tal vez sea mejor. Tampoco soy mamá: tal vez sea mejor. No soy tu tía, ni tu abuelo, ni tu abuela. No soy tu hermana. Tampoco soy el hermano que nunca tuviste: tal vez sea mejor. Vamos, abrázame como abrazarías a tu padre. ¿Ves? Soy como tu padre, o tal vez sea mejor. Porque yo soy tú. Yo te cuidaré cuando nadie más lo haga. Lo sé porque ya lo he vivido. Porque yo soy tú. Y una mano me arrullaba
cuando todo estaba obscuro.
Yo me extiendo al pasado
y me extiendo al futuro
yo abarco todas las eras
y ya me he tragado novecientas mil quinientas veintiséis nebulosas.
¿Ves? Yo soy tú. Secaré tus lágrimas. Pero ahora sé feliz. Porque vendrán los tiempos malos. De todos modos no hace falta que ese sea tu motivo para ser feliz: solo sé feliz porque te lo dicta un pulso de bondad
dentro de tu pecho puro. De todos modos, eso has hecho, ¿no? Yo soy tú. Eso has hecho. O eso harás, según como se mire. Yo lo sé.
Ahora solo piensa que vas a llegar lejos. ¡Será así! Chaval, vas a llegar lejos. No tengas miedo, mi niño. Vas a triunfar. Vas a ser grande. Algún día vas a ser grande. ¡Yo lo he visto! ¡Yo lo sé! Yo soy tú, ¿no te lo he dicho ya?
Vas a ser grande, chico. Vas a llegar muy lejos, mi niño. Cierra los ojos y descansa. Ya es de noche y las estrellas ya tienen otros asuntos que hacer. Cuando te hayas dormido me iré. Pero siempre estaré, porque yo soy tú. ¿No te lo he dicho ya? Cierra los ojos. Descansa. Yo ocupo todas las eras. Yo lo sé todo. Yo soy tú. Ahora duerme. Sé que no entiendes nada. Pero vas a llegar muy lejos, chico.

No soy mago, pero soy luchador.

El rayo entraba
quemando las persianas
de madera.
Afuera, el Sol vomitaba
un infierno vivo.
Pero dentro estaba oscuro.
En esa matriz infernal
aprendí a tenerle miedo al futuro.
Yo no puedo hacer magia,
y como no puedo extirparme
el blasón que el verano imprimió en mi piel
solo me queda pelear un rato más
contra mis demonios, para que me lo oculten
a zarpazos.

Siempre seguirá ahí, ¿no? Bajo todos los tajos.
Pero antes de estar en la matriz infernal, por donde entra el calor del verano enfermo quemando las persianas de madera, ¿quién me lo preguntó? ¿Acaso alguien me pidió opinión sobre si quería vivir o no? Supongo que si me lo hubiesen preguntado habría respondido que sí, ¿cómo no? La vida se le pega a uno detrás de los párpados desde el primer segundo en que vivimos. Y jamás queremos dejarla... hasta que aparece el dolor. Pero es curioso cómo en la pulsión mortífera subyace inocentemente el deseo de vivir. El deseo desesperado de ser feliz, aunque eso conlleve no vivir. A veces la felicidad reside en el no vivir, en la no conciencia, porque al fin y al cabo hay un tipo de felicidad que es la felicidad que brota cuando el horror está ausente. Pero sin embargo bajo la pulsión de muerte absoluta hay una fuerza muy potente que impide que esta se expanda. La fuerza del superyo, que impera sobre todo y aleja al dolor con dolor. No hay magia. Solo esfuerzo. No soy mago, pero soy luchador.

lunes, 2 de abril de 2012

No hay nada como el tañido de una guitarra para escuchar lo que el hombre no puede decir.

Incertidumbre

Tengo el alma mala
del correr del tiempo.
No quiere descansar
para siempre.

Tengo el alma mala
del correr del tiempo.
Tan mala está
que quiere descansar
para siempre.

domingo, 1 de abril de 2012

¿Qué vale el no tocado
Tesoro, si corrompe el dulce sueño,
Si estrecha el ñudo dado,
Si mas enturbia el ceño,
Y si deja en la riqueza pobre al dueño?

(Fray Luis de León, fragmento de ''A Felipe Ruíz, de la avaricia'').

Vivir quiero conmigo.

Fray Luis de León. (Fragmento del primer poema del Libro Primero).
El hogar no es donde dejo el sombrero. El hogar es mi sanatorio.
...y ahora me voy a ir a bogar
por mareas de hiel tórrida
a ver si los vientos me arrullan.

viernes, 30 de marzo de 2012

Purgón. Purgón en vez de pulgón.

jueves, 29 de marzo de 2012

Un puerto anómalo.

Después de estar metido en un videojuego, probablemente diseñado por la madrastra impura, paseo por el puerto contigo. Hay un mercadillo paralelo al mar. Hay portaviones y barcos muy grandes que en la proa tienen artilugios enormes. Tú te sorprendes de verlos, pero yo sé lo que son, y te lo explico. Sirven para que los barcos, al llegar al muro del puerto, no choquen y causen desperfectos. Esos artilugios que sobresalen de la proa chocan primero con el muro del muelle, protegiendo así el barco. Pero el muro es muchísimo más bajo que los barcos. Además, los barcos no están de frente al muro, sino en paralelo a este. Seguimos paseando. Hay un avión. Sí, en el muelle. Es un avión para viajes entre las Islas Canarias. Pero es especial. Ese avión vuela más alto que los otros. Es ridículo, y hablamos de eso. Si vuelan más alto, perjudican más rápidamente a la atmósfera con sus gases. Además, ese avión es tan grande como un avión de vuelos internacionales, y en la parte delantera, justo delante de la cabina del piloto, tiene una punta larga, como si fuera un aguijón. Luego nos alejamos del mar y nos vamos metiendo en la parte del mercadillo, y nos vamos metiendo en la parte de la ciudad. Tal vez llegábamos tarde a algún sitio.

domingo, 25 de marzo de 2012

Seguro que se puede hacer algo. Es solo cuestión de tiempo.

sábado, 24 de marzo de 2012

Me sé muy bien la teoría. Me falla la práctica. No sé, al menos, estoy bien. Ahora estoy bien. De acuerdo, no del todo. Pero estoy bien. Quiero decir, aquí estoy yo, luchando siempre. ¿Qué más da lo que me griten mis demonios? ¿Y qué más da lo que me arañen por dentro? Aquí estoy yo. Este soy yo. Y no me rindo. Estoy luchando, y no importa lo difícil que me lo pongan. Porque algún día lo veré todo de otro color. ¿Que cómo lo sé? Bueno, acaso, en el pasado, ¿no temía no poder tener claridad y paz? Me sorprendí, porque al paso de unas semanas conseguí claridad y paz. Y qué imposible lo veía entonces... ¿Como ahora? No. Ahora sé que puedo conseguir claridad y paz, aunque no me sienta como si pudiera. Verás, ya me conozco. Eso tal vez no cambie nada, porque los demonios seguirán gritando. Es solo que los acepto. Acepto que griten. Ya se irán. No quiero preocuparme por eso ahora. Me preocupa, sin embargo, mantenerme firme, y no tirar la toalla. Ya veremos qué podemos hacer para no estar tan agobiado. Pero de entrada, no me voy a deprimir. No voy a tirar la toalla, para nada. Esto no es nada. Y mira, tengo toda la vida por delante. Ni siquiera esto llega a un bache. Adelante, si este mal es el que me corresponde, que así sea. Pero no le voy a prestar el mínimo interés. Ya se cansará de llamar a la puerta. O tal vez no. Pero no seré yo quien la abra. ¿Y si la tira abajo? Bueno, entonces yo no estaré allí.

lunes, 19 de marzo de 2012

Se asomaron a mis ojos, curiosas,
a ver los penares.
Luego se asustaron y se metieron
otra vez
muy dentro.

miércoles, 14 de marzo de 2012

Abiertos se murieron
sin aletear
les robó la vida
abiertos de par en par.

martes, 13 de marzo de 2012

Peleo por estar bien.
¿Lo consigo?
No importa.
Yo peleo, y eso está bien.

Mañanas

Manarán del pecho mío
suspiros obscuros de atormentado
y aliviará esta pena errante
una brizna de pelo en tu prado.
Rebaños de ansiedad
pacen en mi vientre
y en la mañana al despertar
me saludan guerra y muerte.

viernes, 2 de marzo de 2012

Como siempre o mejor.

Siento que todo irá bien;
en nuestra hoguera, a solas,
sin frío agrio: no esta vez.
¡Eso es el mundo! ¡Un latido sobre la nada!
¡Ese es el mundo! ¡Un minero en los campos, de pasada...!
La tortura me llama hoy
desnuda y vestida de puta.
¿Qué espero...? Con ella me voy.

Desde arriba.

...y así, como pare la noche enferma estrellas,
paren ellas, a la luz de la sombra,
con su luz, tristes semillas
que en mi alma descosida se plantan.

En medio deste clima de emociones
tórridas y de lucha brotan, pues,
las plantas portadoras de desesperación y de pesar.
Y no es extraño que el vástago de ellas sea la confusión.

Y la confusión, más desesperación engendra. ¿Y a quién pare, también, la desesperación? ¡A la confusión, nuevamente! Oh, ¿qué me pasa...?

miércoles, 29 de febrero de 2012

''Todo fluye, nada permanece''.

''Uno nunca se baña dos veces en el mismo río''.

Heráclito de Éfeso.

martes, 28 de febrero de 2012

Es hora.

Ya me he autodestruido
lo suficiente.

Es hora
de dejar atrás la piel mudada de mi alma,
pues en ella no hay vida alguna.

Es hora
de admirar la nueva piel de esta alma mía;
y de plantar paz en mis sienes
y quietud en mis lagos.

''Conócete a ti mismo''.

Inscripción en el templo de Apolo, en Delfos.

domingo, 26 de febrero de 2012

Sticky thought.

Cuando den a luz
a sus vástagos
las penurias y los males;
cuando pueblen mi conciencia
la desdicha y la amargura,
de barro impregnadas;
cuando arda la paz y el mar,
dentro de mí, sacuda sus pútridas olas;
cuando la tristeza me encierre
y me aísle:
entonces habrá poesía.

miércoles, 22 de febrero de 2012

domingo, 5 de febrero de 2012

A los problemas que están por venir:

Estoy preparado para ocuparme de todos vosotros en el momento oportuno. Tened paciencia, sabéis que allí estaré.

viernes, 3 de febrero de 2012

martes, 31 de enero de 2012

—¿Es tan triste, papá? ¿Lo ves así? —y del tierno ojo marrón de la niña escapó una lágrima, embadurnando su moflete terso, levemente rojizo—. ¿Se hace más grande el miedo a morirme cuanto más soy feliz viviendo?

sábado, 28 de enero de 2012

Si ahora pudiera borrarlo todo...
''Cáncer, si te encuentras a la interperie bajo una intensa nevada, levanta la vista al cielo en lo más oscuro de la noche y busca a tu regente, la Luna. Recortada contra el cielo de color azul marino y rodeada por un millar de estrellas temblorosas que resplandecen como diamantes, la Luna aparecerá en toda su majestad, sobre todo si muestra una cara redonda y llena. Como leal compañera de la Tierra, además de su álter ego, la luna no posee luz propia, sino que refleja la luz del Sol con un brillo deslumbrante. Bajo la luz de la Luna, el paisaje parece más mágico de los que jamás puede parecer durante el el día''.

Fuente: www.astrologiaonline.org

Hay asuntos que se solucionan por sí solos.

La razón

La razón ilumina mi rostro cuando estoy perdido.
La razón sacude todo lo que hay a su alrededor, disipa toda duda, ilumina las sombras de la ignorancia.
Con razón me muevo, con razón existo, la razón hace que no sea tan sólo un puñado de química.
Mi razón vence cualquier problema, porque con razón me muevo, cada paso dado es un paso ya recorrido; aprendo, observo, analizo: con razón vivo.

Tiempo

No me gusta oír correr las manecillas de un despertador estando en una casa que no es la mía.
Primero abro los ojos, luego oigo ese sonido.
Recuerdo que a cada latido de reloj, mi alma daba un vuelco.
Eran malos tiempos.
Ahora sucede algo parecido, sólo que las manecillas de ese despertador ya no suenan. Quiero que corran, pero se han quedado paralizadas. También mi corazón está paralizado, sin latir, esperando a que vuelvas.
¿No pueden pararse las manecillas del reloj cuando te tengo, y latir con fuerza cuando no estás? 

jueves, 26 de enero de 2012

Alma - Mägo de Oz

Sé bien que he de librar una batalla más, que mañana otra habrá.

Abram - La esperanza

Cuando caminé desorientado bajo la tormenta,
cuando luché solo sin más armas que la tinta,
cuando todo el odio se apoyaba en mi balanza,
cuando nada me ayudaba, conservé mi esperanza.

martes, 24 de enero de 2012

Abram - Caen del cielo

Otro naufragio mental: puede que ya no salga a flote, de todos modos os pienso impregnar con chapapote.

Abram - Caen del cielo

(...) ya tenemos bastante con seguir hacia delante sin perder el equilibrio; estuve pensando, la solución es el SUICIDIO COLECTIVO.

Abram - Caen del cielo

Soy aquél al que la vida trató mal y plantó cara, soy ése que resucita en medio de una arcada.

jueves, 19 de enero de 2012

"El sabio puede cambiar de opinión. El necio, nunca".

Immanuel Kant.
La noche es profunda,
y me ahogo en sus cielos obscuros;
cada una de las brillantes damas
de la bóveda eterna
se me clavan y me queman por dentro;
y enmudecida mi alma
grita por que la aboguen.

El cosmos intercede
llevando como las olas
mis lágrimas invisibles.
Y una risa se oye en algún rincón
de una galaxia.
¿Puedes oírla? Cierra mis heridas...

Es profunda la noche y hondas son sus mareas.
El flautista de Hamelin usó la música para expulsar a las ratas de la ciudad. Yo uso la música para expulsar a mis demonios personales de mi mente.

Usa la música para calmar una mente enferma.

(...) la ciudad nunca duerme, por tener la obligación de aguantarme y el agujero donde meterme.

Violadores del Verso - La ciudad nunca duerme

miércoles, 18 de enero de 2012

Vuelo hasta una mancha en la pared; me vuelvo ajeno a todo y me sobran hasta mis propios pies.

Extremoduro - Pedrá

Al mundo de mierda

Mira... No sé. Soy feliz a veces. Otras no. En circunstancias como éstas en que me embarga la ansiedad y se agita la sombra en mi vientre, no quiero saber nada de ''lo de fuera''. Porque pienso que, al fin y al cabo, ¿qué soy yo? Bueno, sí, tengo amigos, hay gente que me quiere, todo eso está muy bien. Pero, ¿qué soy yo? En circunstancias como ésta, pienso que no represento nada para el mundo. Al fin y al cabo, tras mi muerte, ¿alguien se acordará de mí? Sí, es cierto, mi familia, mis amigos, ellos se acordarán. Lo sé. No lo dudo. Lamentaran mi pérdida. Pero... Ya está. El tiempo me tragará. Nadie nunca leerá mis escritos cuando ya haya muerto. Nadie observará mi filosofía. Eso no me gusta. Me hace sentirme un grano de arena en medio de un desierto frío y extraño. Ante este tipo de cosas, y en circunstancias como ésta, me gusta darle la vuelta a la tortilla: es el mundo, es todo lo que está fuera de mí un grano de arena, y soy yo un desierto frío y extraño. Y tan frío... Dentro de mí se arremolinan las arenas y soplan vientos gélidos. Y dentro de mí no vive nada. Sólo la pena. Pero el caso es que soy un desierto ancho y extenso, y aunque no lo parezca por lo desolado, me puedo sumergir en mí mismo y encontrar mil glorias entre las arenas. Al fin y al cabo no se está tan helado si uno se sumerge de lleno en ellas. Ahí encuentro compañía. Es un hogar donde me puedo guarecer. Y sólo importo yo, el mundo; el mundo, que no tiene que ver conmigo y que me hace daño haciéndome creer un grano de arena, queda ya lejos de mí.

Y a todo ésto, ¿por qué necesito guarecerme del mundo, y hacer de él un grano de arena, y hacer de mí un desierto frío...? Es por la ansiedad que puebla mi pecho, que aflora como la sangre amarga de la tierra enferma ante cualquier rasguño, e incluso ante cualquier roce superficial.

He aprendido a estar solo, a llorar sin molestar, y a cagarme en los calzones y a dudar.

Extremoduro - Pedrá
-No tienes que preocuparte por nada -me digo a mí mismo en medio de la vastedad de la jungla negra donde descansa mi mente.
Pero la pantera sigue mirándome fijamente, con sus ojos rojizos, brillantes como la sangre de la tierra enferma.

martes, 17 de enero de 2012

Soy un ente atormentado,
un vagabundo de entrañas roídas
que va buscando cariño,
con un palo en la derecha
y en la izquierda un saco
donde guardo el corazón,
que de tantos viejos males
de mi pecho se salió.

domingo, 8 de enero de 2012

Son mis retoños
los poemas que escribo
y me cantan años después
los cantos que he olvidado.
En este espacio siento un vacío lleno de espadas
y sus brillos me confunden
y sus hojas se me clavan.

sábado, 7 de enero de 2012

En medio de la quietud nocturna de la playa, se bajó los pantalones vaqueros junto con los calzoncillos. De cara a la marea, con la brisa despeinando su pelo y refrescando su cara, agarró su pene y expelió el fluido amarillento. El dulce sonido de la orina chocando contra la arena fue un añadido que, junto al vaciado constante de la vejiga, lo hizo sonreir por primera vez en la semana. Había hecho bien en tomarse unas vacaciones por adelantado.