sábado, 31 de octubre de 2009

Ansiedad exasperante

Es ridículo. Totalmente estúpido. No puedo estar. No puedo parar quieto. Necesito sacar fuera de mí lo que tengo. Desahogar el alma, limpiar el negro doliente de mi interior. Escribo y me siento mejor, aunque antes de hacerlo, no podía dormir. Tengo pánico a cosas sin remedio. Y en el intento de vencer el dolor que producen me pongo más y más nervioso. Y trago, trago cualquier cosa. Amor, felicidad, todo, todo lo que percibo, cualquier cosa. Y luego caigo. ¿Estás leyendome, Dios? ¿Dónde está tu compasión? Sufro. No aguanto la incertidumbre del futuro. No quiero morir, ni quiero ir al infierno. Quiero ser feliz, sólo eso. Escúchame Dios. Léeme. ¿Puedes darme un poco de alegría? ¿Podré descansar junto a ti para siempre...

...seas quien seas?

Ser líder de una revolución

No me considero un líder.
Pero soy un idealista, y vivo en las fantasías, y vivo de los recuerdos, y vivo siempre en mi mundo.

No quiero guerra, no quiero muerte, no quiero nada; nada malo.
Quiero paz, quiero vida, quiero todo; todo lo bueno.

Y eones atrás, luchaban por la paz, luchaban por la guerra, luchaban por algo. Todos luchaban. Todos luchan. Pero luchar es hacer guerra, aunque se luche por la paz.

Me gustaría ser líder de una revolución, aunque no me considere un líder. Ser líder de sonrisas. De felicidad. De vida. Ser recordado después de morir, no ser alguien más en este planeta. Pero soy un idealista.

Y me gustaría que todas las personas del mundo nos uniéramos, nos negaramos a la guerra, a la muerte, a todo lo malo.

Que en las calles no existiera el sufrir... Nunca más.

Odio


¿Qué puedo decir? Si odio a la gente... Si odio la vida... Si miro a mi alrededor, y están todos corriendo, todos de la mano, todos en su mundo. Todos fluyendo. ¿Y qué puedo decir? Si necesito un abrazo, si necesito comprensión, si necesito hablar con la gente que antes detestaba. Ya no sé si amo o si odio, si vivo o si muero. A veces es mejor dormir. ¿Qué os puedo decir? Odio ser así. Me odio. Pero también me amo.

viernes, 30 de octubre de 2009

Recuerdos

Aún huele a ella
mientras bajas las escaleras
en el frío y el silencio,
escalón a escalón.

Aún huele a ella y no sabes por qué.
No vive en el aire
no vive en la noche,
ha salido de algún lugar de tu razón.

El cantar de los grillos,
el sonido de tus pensamientos,
la voz que enmudece,
tanto silencio.

Y de pronto desaparece,
ocultándose de nuevo en tu memoria,
ocultándose como la luz de tus pupilas,
el intenso latido de tu corazón.

Y con una bocanada de aire frío,
regresa a ti su olor y su alma,
su intenso recuerdo
que ya nunca más será real
sino en ti.

Escribir compulsivamente

Escribir compulsivamente no me molesta. Me hace un poco más feliz, a cada palabra que agoto. Cada palabra es una lágrima del alma. Con cada palabra puedo vivir con menos peso. Escribir compulsivamente no es ningún error. Me siento alegre, me siento libre. Me relajo. Ahora mismo estoy relajado. Y, parece, que, por un momento, ni el mal, ni la muerte, ni el sufrir, existen. Ahora pienso en el futuro, que ya no es tan incierto. Casi vislumbro algo... Sí. Me relajo... Escribo... A cada palabra me relajo, y quiero relajar a mi lector. Quiero que el lector sienta lo que siento yo. Ahora estoy completamente a gusto. No me molesta nada. Ojalá fuera permanente. Ojalá no muriera en mí la relajación. Ojalá yo no muriera nunca, y sonara siempre esta canción de mi alma.

Está sólo en tu cabeza

Todo. Odias. Amas. Sufres. Vives. Sientes. Quieres. Deseas.

Pero, al final, está sólo en tu cabeza.

El futuro, el pasado.

Al final, está todo en tu cabeza.

La muerte.

Todo en tu cabeza.

Y es entonces cuando levantas la cabeza y miras al cielo. Y ves las estrellas. Y ves la negrura. Y ves la belleza. Y es entonces cuando la vida, tan corta, tan triste, tan sinsentido, cobra de pronto significado. Y entonces dices lo que quieres oir: ''Aquí soy feliz... así estoy feliz... Tumbado, solo.'' Mirando a las estrellas, solamente, hablando contigo mismo. Y no hay Dios ni hay muerte ni hay miedo. Sólo amor.

Amor por ti mismo. Y eso es la felicidad.

La gente que tanto me hirió

Años atrás, muchas de vosotras
muchos de vosotros
os hacíais los interesantes,
creíais tener el mundo sólo para vosotros
creíais que era necio, quizá
creíais que mi sufrimiento era entretenido, quizá.

Ahora ya no.
Ahora no existe el miedo.
Ahora no existe el sufrimiento.
Ahora no existe la inferioridad.

Porque ahora...

Me toca ser feliz. Y hacer lo que quiera hacer, cuando lo quiera hacer.

Nadie deja a nadie

Porque todos somos iguales. Porque todos nos deprimimos. Porque después de esta vida hay muerte. Y porque sin apoyo nadie sería nadie.

Relajarse ahora

Tengo que
relajarme ahora.

La gente fluye, va y viene
como yo.

Pero yo me siento diferente, y a la vez quiero no serlo.

Quiero integrarme, ser normal, ser social.

La gente fluye...
...va y viene...

Sólo busco ser feliz, como siempre.

Me alegra, me alivia
llenar este papel
llenar esta hoja
llenar este cuadro en blanco
...con toda mi ilusión.

jueves, 29 de octubre de 2009

Dibujo friki


Ésto es lo que pasa cuando te aburres, y cuando no tienes idea de dibujar xDDD He intentao' hacer mi cara. Dejémoslo en que es una especie de ''Guernica'' a Paint.

Lo de mi cara llena de golpes y moretones no significa mucha cosa xD Sólo trataba de expresar mediante un dibujo lo que se siente a veces por dentro, en momentos de angustia, etcétera.

Pero vamos, que ahí queda la cosa.

¡Callad!

¡Callad! Que no aguanto ya este mundo.
Sin remedio, a cada pensamiento, a cada
mandoble deste ruín futuro me hundo.
¡Y quisiera ser yo la misma nada!
Despierta en mí el demonio iracundo
que me mantiene ardiendo en esta lumbrada
que dice que yo siempre lo confundo
que nunca tengo esta alma amparada.

Ríete de la vida

Muchos de vosotros seguramente estaréis tremendamente jodidos al leer esto. Os ha dejado vuestro novio, se os ha muerto algún familiar, habéis suspendido algún examen, os querrán pegar una paliza, estaréis enganchados a las drogas... No descarto ninguna de esas posibilidades. Pues bien, os digo lo siguiente: La vida es lo único que tenéis y lo único que importa realmente. Sed egoistas, pensad por vosotros mismos, razonad, tranquilizáos. La muerte es la nada. No la necesitais. Necesitais SER FELICES. Pues bien, sedlo. Olvidaos de vuestro ex novio, de vuestro familiar, de vuestro examen, de las amenazas o de las drogas.

Pensad en el futuro con sutileza, pensad egoistamente. ''¿Qué me depara...? ¿Hago lo correcto...?'' Creo que es la mejor filosofía que puede tenerse en este mundo.

Y ahí acaba mi consejo.

¿Y qué es la felicidad, y qué es la cordura?

Preguntas todo eso en el interior de mi cabeza.

La felicidad es que no lo preguntes.

La cordura es saber que esa es la felicidad.

Por suerte, en esta vida, contamos con seres humanos que son como nosotros, que nos escuchan, nos entienden y nos apoyan. Si puedo tener la libertad de contar mis pensamientos y sentimientos a cualquiera, y siento su apoyo, entonces estoy feliz. Y la cordura no es más que otro invento absurdo. ¿Acaso no son felices los locos? ¿Por qué no iba a serlo un neurótico como yo?

miércoles, 28 de octubre de 2009

Entenderme

Parece que siempre me rio, que juego con los demás. Parece que no tengo moral. Parezco un perro. No entendéis que los perros tienen pulgas, y que mi cabeza tiene cuchillos clavados que arañan mi ser. Soy feliz siendo así. Sólo me vale eso. ¿No es la vida ser feliz? Todos queremos serlo.

martes, 27 de octubre de 2009

Prefiero estar loco

Prefiero estar loco para no ver lo que no quiero ver. Prefiero vivir en el mundo que yo mismo me construyo. Pasan los días... Lasitud. Estrés. ¿Estoy acaso en un pozo? A veces veo la luz, que entra desde arriba. A veces me arrimo a sus paredes, me recuesto. Cierro los ojos un rato, sueño. ¿Es esto felicidad? Prefiero estar loco para no saberlo, para no preguntarlo.

Prefiero estar loco para no sufrir.

¿Y quién me recordará?

''¿Y quién me recordará?'' Preguntas en el silencio de mi cabeza. Te recordarán los gatos a los que miras, a los que te pareces. Tan sigiloso, tan silencioso, tan alerta. Te recordarán los perros, por querer ser como ellos. Siempre leales, dispuestos a morder, a defender, a atacar. Te recordarán las nubes, porque es ahí donde está siempre tu cabeza. Te recordarán los árboles, que te dan cobijo y agitan sus hojas al viento... Tan relajantes... Te recordará el mar, por perderse tu imaginación detrás de las olas, detrás de las aguas. Te recordará la Luna, porque ella es la única que te quiso. Te recordará el firmamento, las estrellas, te recordará la Naturaleza.

Pero...

¿Te recordará algún hombre cuando mueras, cuando ya no estés aquí?

domingo, 25 de octubre de 2009

La senda del héroe


La senda del héroe se construye con dolor, y se construye con sacrificio. El héroe desconoce cuán grande es. Él lucha según sus principios, y según sus pensamientos, y nunca se rinde. Trabaja con esfuerzo, y nunca desfallece. Él tiene un pasado que le hace moverse, que le araña en la piel del sentir. Y, sobretodo, el héroe es valiente, encara, afronta, acepta cualquier tipo de dolor. El épico héroe va a contracorriente y al final consigue la felicidad, y es recordado para siempre. Es por eso que un héroe nunca muere.

Ella

Ella va por el mar a ras del agua. Al ponerse el Sol un escalofrío recorre tu piel. ¿Por qué tan bella? ¿Por qué tan bello el amor? No preguntes, sólo siéntelo. Ella roza el agua con sus manos, con su boca, con su ser. Y quisieras ser mar, y quisieras ser agua. ¿Por qué tan tierno, por qué tan idílico? No preguntes, sólo siéntelo. Y se enfoca en ti el deseo y la pasión. Y deseas con pasión que nunca, ninguna tormenta asole el océano. Porque...

...realmente, AHORA has encontrado una flor de mar navegando por Internet.

Autoestima exasperante

No es bueno llegar a ningún extremo. Es algo racional, ¿no? Los extremos no son buenos. Una persona puede ser generosa, muy muy muy generosa, por ejemplo. Pero, entonces, los demás se aprovecharían de su generosidad y eso le llevaría al dolor. Otra persona, por el contrario, podría ser muy, pero que muy tacaña. A su vez, eso le llevaría al dolor, a la larga. Siguiendo esta lógica, ninguna de estas personas sería perfecta. Parece ser, por tanto, que la perfección es el término medio. Aplicado a todos los aspectos de la vida, el equilibrio parece ser siempre lo perfecto.

He dicho que los extremos no son buenos. Pues bien, yo busco la perfección obsesivamente. Busco el equilibrio obsesivamente. Intento ser perfecto, sí. Y veo en el espejo de mi conciencia un yo perfecto, equilibrado. Soy consciente de que ésto puede parecer algo muy subjetivo, pero suelo intentar contrastarlo con datos objetivos. Me siento bien conmigo mismo, tal cual como soy. Pero por el contrario, no me soporto. No soporto hablar conmigo mismo, pensar. Pensar y pensar... Nunca dejo de pensar, ni de escribir, ni de poetizar. ¿Es ésto la perfección? ¿Es lo que realmente quiero? Sólo quiero ser feliz. Pero, ahora mismo, parezco estar recogiendo rosas espinosas sin parar, sin poder evitar que su olor me atraiga, me envuelva y me seduzca.

Buenas noches

Primer puesto en la pared de una clase. Todo cambio puede ayudar a romper la caída de una desgracia doméstica. Todo rumor desplazado está perdido y encontrado. Falta de disciplina. Una mano para cortar la otra. Tan poco profesional, no eres una amiga, eres sólo una amante. Nada excepcional. Esto es correccional

Espejo en la pared

Enmarca el cuadro

Refleja este beso para desearnos a todos buenas noches


Primer día en la silla de una víctima. Toda superficie desplazada puede ayudar a curarte de un rasguño. Todo rasgo visualizado igualará tu multitud. Una mano para lavar la otra. Sé una perfecionista, no eres nada si eres sólo una más. Algo material. No es nada personal.

Espejo en la pared

Enmarca el cuadro

Refleja este beso para desearnos a todos buenas noches


Todos estamos bailando la misma canción triste. Y no estamos durmiendo, pero no tardaremos mucho. Convicción ilícita. Confesiones incompletas. Correción. Restricción sumisa. Las instrucciones se repetirán. Dirección

Espejo en la pared

Enmarca el cuadro

Refleja este beso para desearnos a todos buenas noches


Goodnight, de ''The Birthday Massacre'', traducida por mí. Tan profunda...

sábado, 24 de octubre de 2009

Agotamiento mental

Excede. Simplemente excede a mis capacidades. Demasiada actividad. Demasiado ruido dentro de mi cabeza. Pero sé que me encontraré mejor... Si cierro los ojos y duermo un lapso de tiempo. Cuando despierte podré seguir mirando las estrellas. Y, ¿quién sabe? Tal vez eso me agote. Por lo infinito del cielo. Por la grandeza de las estrellas y sus brillos lejanos. Por querer abarcarlo todo, y querer de todo hacer poesía.

Sentimentalismo ilícito, trasmutación de valores

¡Qué bien sientan las letras! Y qué bien sienta una hoja en blanco, desnuda, virgen. Tan nueva... Sienta bien llenar una hoja entera de palabras, pensamientos. Éstos no pueden verse, de modo que los transformamos en sonidos, gestos... Y sí, palabras. Pero la forma más directa, quizá, de ver un pensamiento, es escribirlo. Escribir pensando, pensar en el escrito... Es una buena forma de hablar consigo mismo, desde luego. Y, además, lo que escribimos perdura en el tiempo y sirve para enseñar a los demás lo que pienso o siento. Sentir... Ahí quería llegar yo. Proliferan las ideas decandentes en esta sociedad. Parece que todo sigue unos patrones. Las chicas, sensibles, los chicos duros. Sólo puede ser así. Pero la cosa va cambiando. No es como antes, no, no. La sociedad se abre cada vez más. Ahora no importa tanto si te atrae sexualmente tu mismo sexo; no importa si te identificas más con un sexo que con otro; no, no. De todos modos, queda mucho por hacer. La libertad absoluta está muy lejos. Personas. En ellas acaba nuestra libertad. Sus ideas decadentes nos condicionan. Aunque el hombre sensible existiere desde el principio de los tiempos, ellos no lo toleran. En la Edad Media, los caballeros usaban su sentimentalismo para conquistar damas. Es un recurso que no me desagrada, puesto que conseguir a la dama o no, depende del intelecto del caballero, de su sinceridad y su implicación. No de otras banalidades, como el aspecto externo. Y es que el amor no es otra cosa que desnudez del alma. Abrir el corazón en canal. Sacar los sentimientos de la manera más bella, de la misma manera que ellos besan tu espíritu. Y, sí, como con los pensamientos sucede: los sentimientos pueden verse en las letras. Por eso escribo. Sin tapujos. Sinceridad. Sólo quiero hablar conmigo mismo, y que los demás vean lo que siento o pienso. Si no, ¿dónde estaría la libertad?