domingo, 29 de diciembre de 2013

Tengo cáncer de alma.
Duermo cada noche
en los muslos de cualquier sirena
y me despierto al salpicar
de un mediodía de goma;
el sol en blanco y negro
contra el vientre del mar.

Tengo cáncer de alma.
Las algas
se me han pegado en los párpados
y en lo oídos
los cantos
de cualquier sirena.

Tengo cáncer de alma.
A veces animo al tiempo
y se hace bello;
cielo gris de farolas,
una manta para inseguros.

Tengo cáncer de alma.
Coger al cocodrilo
por los cuernos.
Casi salgo.
El horizonte se aleja más.

Tengo cáncer de alma.
Y agradecido.

Tengo cáncer de calma.
Pago tributo
con los párpados muy abiertos
a nosequé dios.

Tengo cáncer de cama.
A veces duermo en el suelo
sin sueño.

Tengo cáncer de amar.
A mí, mucho
algo dolerá.

Tengo cáncer de árbol.
Por los que no pueden hablar.

Tengo cáncer de libertad.
Tiéndeme entre barrotes.

Tengo cáncer de alma.
Duermo cada noche
en los muslos de cualquier sirena
y me despierto al salpicar
de un mediodía de goma;
el sol en blanco y negro
contra el vientre del mar.

Tengo cáncer de alma.
Las algas
se me han pegado en los párpados
y en lo oídos
los cantos
de cualquier sirena.

Tengo cáncer de alma.
A veces animo al tiempo
y se hace bello;
cielo gris de farolas,
una manta para inseguros.

Tengo cáncer de alma.
Coger al cocodrilo
por los cuernos.
Casi salgo.
El horizonte se aleja más.

Tengo cáncer de alma.
Y agradecido.

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